En el programa ‘El magazine de Cuenca’ del 13 de diciembre (Onda Cero Radio), Carlos Cano, de Ecologistas en Acción denunció la “apertura de vías descontrolada de escaladores en las Hoces de Cuenca y el perjuicio que esto supone para las aves”. También entrevistaron al Presidente de la Federación de Montaña de Castilla La Mancha, Carlos Ortega, quien responde a esas críticas con datos veraces y objetivos.
La exposición de Carlos Cano está plagada de imprecisiones, medias verdades y mentiras, además de buscar la crispación con su tono y declaraciones. Enumeramos los puntos fundamentales:
- Miente al decir «…como mínimo en 3.000 vías…«, cuando actualmente no se superan las 1.350.
- Miente al decir «…ha dejado desde 2007 de nidificar porque no es posible con este nivel de molestias que tiene pueda hacerlo….». En el sector Piscinas se ha respetado durante años la prohibición de escalar por nidificación. No hay ningún estudio que avale que la escalada fue responsable del abandono del nido.
Sí sabemos que el halcón nidificó en el sector Piscinas y que la escalada se prohibió allí en 2007. La prohibición se levantó en octubre de 2014 después de comprobarse que el nido estaba abandonado desde hacía varias temporadas. Medio Ambiente constata que el halcón continuó su presencia en las hoces algunos años más.
No se puede achacar el deterioro ambiental de las hoces a la escalada. La escalada indudablemente genera un impacto, que no es ni siquiera comparable al que producen otras actividades humanas en la zona ni a la presión que genera la cercanía a la ciudad. - Dice «…se ha producido una masificación…«, sin tener en cuenta el crecimiento global de todos los deportes (por suerte para nuestra salud).
- Falta de rigor al decir «… nos dicen las fuentes, esos números…». ¿Qué fuentes?
- Miente al decir «…se están extendiendo a las Hoces de Valdecabras o la del Buey…». En Valdecabras hay vías equipadas desde los años 80, como se puede ver en la 1ª edición de la guía de escalada en Cuenca. En la hoz del Buey hace muchos años que no se escala ya que su normativa (publicada en el Boletín Oficial de la comunidad tras su declaración como Monumento Natural en 2001) prohíbe la actividad.
- Miente al decir «…no es creíble que esa autorregulación pueda funcionar, y de hecho, no ha funcionado…«. La autorregulación ha funcionado perfectamente (todas las aperturas que se han hecho en 2017 han contado con autorización y las que no, se han denegado; en algún caso se han desequipado vías que se abrieron “ilegalmente”). Esta autorregulación no es un invento de los escaladores, sino la consecuencia de un trabajo conjunto de la Federación con Medio Ambiente y el Ayuntamiento de Cuenca. Es Medio Ambiente quien determina dónde y cuándo se puede equipar y escalar, y después los escaladores establecen restricciones “extra” en todas las vías donde se detecta nidificación y determinan qué vías se pueden equipar, o no, en las zonas previamente autorizadas por las autoridades ambientales.
- Desinformación al decir «…una posible solución en una regulación en la que se establezcan zonas, limitaciones temporales …», cuando desde hace años se respetan zonas por nidificación. De hecho son los escaladores quienes instalan placas de prohibición temporal en las vías.
- Desinformación al decir «...poner un límite de vías e ir a otras hoces del entorno…». Ya hay una regulación de equipamiento de vías, y en los últimos años se equipa mucho menos. En hoces cercanas como la de Beteta y Tragavivos está prohibido escalar.
Audio de la entrevista de Carlos Cano de Ecologistas en Acción y Carlos Ortega Presidente de la FDMCM.
Audio del programa completo en la web de Onda Cero.
Transcripción del audio de la entrevista
Entrevista completa con Carlos Cano, de Ecologistas en Acción, y Carlos Ortega, presidente de la Federación de Montaña de Castilla-La Mancha
Onda Cero: Decís que no hay regulación suficiente por parte de las administraciones. ¿Dónde surge el problema, cómo ves la situación, cómo está la realidad?
Carlos Cano (E.A): Nuestra crítica es que principalmente no hay esa regulación, no hay ese control de las administraciones en cumplimiento de sus competencias, y ahí están los datos: en 2007 hay 600 vías de escalada entre las hoces del Júcar y Huécar, lo que estaba publicado en la guía de escalada de ese año, y ahora nosotros en ese artículo estimamos que había el doble ya de vías, y luego, después del artículo nos hemos informado y no es que haya el doble, es que hay bastante más. Estaríamos ya como mínimo en 3.000 vías, lo que es un auténtico disparate, porque esto ocasiona un deterioro importante de la geomorfología, de la roca, e impide la nidificación de especies valiosas y protegidas que antes nidificaban y ahora ya no lo pueden hacer.
¿Qué especies?
Carlos Cano (E.A): Sí, por ejemplo, nosotros estudiamos el halcón peregrino, que nosotros, por afición, y teniéndolo tan cerca de Cuenca, pues venimos, siguiéndolo desde hace muchos años. Ya desde 1986 estábamos nosotros comprobando dónde nidificaba esta especie, y, bueno, pues ha dejado desde 2007 de nidificar porque no es posible con este nivel de molestias que tiene pueda hacerlo.
¿Ha cambiado esa rutina? ¿Las aves nidifican en algún otro sitio? ¿Tenéis controlados esos movimientos?
Carlos Cano (E.A): El halcón peregrino es una especie rupícola, que cría en lugares rocosos, y, bueno, aquí en el Júcar tradicionalmente ha criado y ahora no lo hace y lo que los escaladores dicen es que han llegado a un acuerdo con Medioambiente para autorregular su actividad, pero nosotros lo que decimos es que esa autorregulación ha fracasado porque se ha producido una masificación de la actividad con el consiguiente impacto que produce en las aves y en otros elementos.
¿En alguna zona concreta? Porque habláis en términos generales de las hoces de Cuenca… ¿Hay algún punto que os preocupe más?
Carlos Cano (E.A.): No vamos a dar puntos concretos, pero sí lo tenemos claro, y la Administración y sus agentes, la zona donde ha habido mayor nidificación histórica del halcón peregrino, en el lado del Júcar, esas zonas lo que estamos proponiendo es que se establezca una limitación total de la escalada, desde principio del invierno al principio del verano para permitir el que no haya molestias en un margen suficiente para que la especie vuelva a instalarse.
Habláis de muchas vías de escalada, 3.000 es lo que nos decías al principio, ¿En cuánto tiempo se han abierto? ¿Tenéis contabilizado cuánta gente puede visitar esas vías también para conocer cómo ha cambiado esa zona y en cuánto tiempo?
Carlos Cano (E.A.): Realmente no sé, los datos que tenemos es que en 2007 en la guía de escalada que se publicó se habla de 600 vías de escalada, ese número se ha multiplicado hasta llegar a las 3.000. Que nos dicen las fuentes, esos números y luego la presencia sobre todo en fin de semana, la masificación es muy latente, y puede verse en la zona mientras se recorre.
¿Quién tiene la competencia y qué solicitáis?
Carlos Cano (E.A.): Lo que dice el artículo que publicamos en Quercus es que las asociaciones de escaladores habían llegado a un acuerdo con, suponemos, Medio Ambiente, para autorregularse a ellos mismos. Esto, de ser cierto, indicaría que la Administración ha hecho dejación de sus competencias, porque no es creíble que esa autorregulación pueda funcionar, y de hecho, no ha funcionado.
Entonces, lo que queremos es que la Administración cumpla con su misión y sus competencias para que realmente estas especies que han dejado de nidificar, que están protegidas, que lo vuelvan a hacer. Para que no se extienda. Uno de los argumentos que nos decían las administraciones es que si los escaladores vienen aquí, no impactan en otras zonas, pero es que también se están extendiendo a las Hoces de Valdecabras o la del Buey, de manera que lo que tiene que haber es una regulación para reducir el impacto que produce actualmente.
¿Tenéis hecho algún censo de la ejemplares de la zona?
Carlos Cano (E.A.): Hay muchas especies rupícolas de las que necesitan la roca para nidificar o para descansar, para su estancia, pero vamos, entre las nidificables no tenemos censos más que el halcón peregrino que solo había una pareja y ha desaparecido, es una especie territorial, entonces, si hay una pareja, no habrá más en unos kilómetros. Esto se distribuye a lo largo de las hoces, otras especies muy frecuentes que han disminuido por las molestias son vencejo, avión otero, avión común, pequeños halcones que son más escasos por esas molestias. Hay muchas especies que escasean.
¿Veis posible una solución?
Carlos Cano (E.A.): Nosotros vemos una posible solución en una regulación en la que se establezcan zonas, limitaciones temporales para el caso concreto del halcón peregrino, hasta el invierno y el verano, y también una moratoria de apertura de vías de escalada, porque lo que hay es muchísimo y el poner un límite de vías e ir a otras hoces del entorno. Eso supone desinstalar una parte de lo que ya se ha hecho.
¿Crees que son posibles esas soluciones que proponéis en un futuro?
Carlos Cano (E.A.): Yo creo que sí es posible, lo que falta es que la Administración sobre todo quiera llevarlo adelante.
Turno para Carlos Ortega, presidente de la Federación de Montaña de Castilla La Mancha
Seguimos, vamos a escuchar la respuesta a esas críticas, a esas sugerencias de Ecologistas en Acción. Comenzamos con la Federación de Montaña de Castilla-La Mancha, Carlos Ortega, que nos atiende esta mañana.
Carlos Cano, de Ecologistas en Acción, nos apuntaban que había unas 600 vías en 2007 y ahora podrían ser unas 3.000, lo que ellos dicen que es un descontrol, ¿qué opináis?
Carlos Ortega (FDMCM): Bueno, lo primero, lamentar las inexactitudes de Ecologistas en Acción. Evidentemente había unas 700 vías pero a día de hoy no superan las 2.000, calculamos unas 1.600-1.700 contando las vías del sector de Valdecabras.
En cuanto a la autorregulación en la edificación de vías, Ecologistas en Acción considera que se os ha ido de las manos, ¿qué opináis vosotros?
Carlos Ortega (FDMCM): Son puntos de vista encontrados. Desde el punto de vista deportivo, a los escaladores les va a parecer que hay pocas, pero desde el punto de vista ecologista, sobran todas. Preferirían que no hubiese ninguna y que nadie pisara las hoces para que los animalitos y vegetación campasen a sus anchas. Yo creo que debemos llegar a un entendimiento, es Medio Ambiente el que pone las pautas, y fueron ellos los que pusieron esta regulación. Veíamos que podía haber un número elevado de vías, no pensando en hoy, sino en mañana. Lo que no veíamos normal es que en una década ese cupo se fuese a cumplir y que en unos años las futuras generaciones no tuviesen la oportunidad de abrir vías.
Nos decían hace unos momentos que una pareja de aves ya no nidifica en una de esas vías, ¿qué podéis decir del impacto que medioambientalmente puede tener la escalada?
Carlos Ortega (FDMCM): Bueno, lamentar una vez más la inexactitud de la información de Ecologistas. No es cierto que desde el año 2007 el halcón no esté. El halcón ha seguido nidificando en las hoces del Júcar. Hubo una zona de escalada, en la zona de la piscina municipal, que estuvo durante años cerradas a la escalada y el halcón no quiso nidificar allí y migró a otras zonas en las que se hacía escalada.
En las hoces se lleva haciendo escalada desde hace décadas y el halcón ha convivido con los escaladores, y cuando se han hecho zonas de exclusión, el halcón no se ha ido a esas zonas. Se ha ido precisamente a sitios donde parecía un poco increíble.
Sobre esa propuesta de E.A. de que hubiera zonas limitadas temporalmente, ¿qué os parece? ¿Y de que haya también una moratoria de apertura de nuevas vías?
Carlos Ortega (FDMCM): La moratoria de apertura de nuevas vías no entendemos a qué nos lleva. Desde que se creó el Comité que regula (con el acuerdo del Ayuntamiento, Federación, Medio Ambiente y el Colectivo de Escaladores, sin lo que nada funcionaría), la apertura de vías ha disminuido de forma vertiginosa. Se siguen abriendo vías pero lo que más se hace es reequipar. Poner en funcionamiento antiguas vías que estaban dejando de ser seguras, lo que la convierte en una nueva vía. El dejar zonas de exclusión se está haciendo ya. Si ellos tienen alguna zona concreta, alguna proposición, lo que deberían hacer es dirigirse a la Federación o al Comité de Equipamiento y hacer una propuesta concreta.
Estamos abiertos a escuchar sugerencias, no tenemos problemas en entrevistarnos con ellos o hacer una reunión más amplia, con datos en la mano. Habría que llevar un trabajo más serio para saber cuál es la situación real de estas especies. Nosotros nos estamos autorregulando, hay muchas vías con un cartel de “No escalar” y eso se respeta cuando hemos detectado un nido de cualquier especie, no solo de las protegidas, sino de cualquiera, y eso hay que ponerlo en valor. Si ellos saben de alguna especie que anide en una vía, que lo comuniquen, no habría ningún problema en poner limitaciones.
José Yañez Yáñez.
Ya habéis leído o escuchado las dos versiones, ¿qué opináis?
Como siempre…enfrentados, puntos de vista opuestos por intereses distintos pero objetivos paralelos.
Para que los escaladores seamos mejor vistos por los «ecologistas con carnet» (y lo digo sin animo de ofender), tenemos que currar y demostrar con acciones y campañas (como las de ES ) dando ejemplo de que no queremos practicar nuestro deporte en zonas muertas, al contrario, queremos ver vida natural y al 90% de nuestro colectivo está concienciado con ello.